miércoles, 19 de septiembre de 2007






CONTENIDO


INTRODUCCION
IMPORTANCIA DE LA ALIMENTACION
¿Qué es la nutrición?
¿Qué función desempeña el alimento en el organismo?
¿Qué trayectoria sigue el alimento en el organismo?
CAPITULO II
REQUERIMIENTOS
¿Cuales son los componentes de los alimentos?
CAPITULO III
METABOLISMO
¿Qué función realizan estos componentes en el organismo?
Grasas (Lípidos)
Carbohidratos (Glúcidos)
Proteínas (Protidos)
Fuentes nutritivas de componentes básicos
Tabla nutrimental de componentes básicos
¿Cuántas calorías necesitamos?
Complementos alimenticios
Minerales
¿Por qué son tan importantes los minerales?
Vitaminas
Agua
El hígado laboratorio químico del organismo
El hígado en el metabolismo de los carbohidratos
El hígado en el metabolismo de las grasas
El hígado en el metabolismo de las proteínas
El hígado en la función antitóxica y protectora
Otras funciones del hígado
CAPITULO IV
DEFICIENCIAS METABOLICAS (ENFERMEDADES)
Sistema hormonal
Diabetes
Poliuria
Albinismo y vitíligo
Desarreglos menstruales, quistes y miomas
Sistema nervioso
Sistema digestivo
Agruras
Gastritis
Ulceras
Estreñimiento
Hemorroides

Colitis
Sistema circulatorio
Infecciones de riñones y vías urinarias
Litiasis
Arteriosclerosis
Taquicardia
Artritis
Reumas
Calambres
Gota
Hipertensión
Sistema inmunológico
Primera barrera
Segunda barrera
Tercera barrera
CAPITULO V
SOLUCION
Auto recuperación bioquímica
Alternativa para obtener una auto recuperación bioquímica
del organismo

PRIMERA FASE
Contenido nutrimental de “Bioaliv”
Reconstrucción de tejidos
Un corazón más sano
Energía
El peso ideal
Una buena digestión
Huesos sanos
Modo de preparar
Formas de administración

SEGUNDA FASE
Características de “Olicact”,
¿Cómo funciona “Olicact”?
¿Cómo reacciona el organismo con “Olicact”,
Modo de empleo
Vía oral
Vía cutánea
Vía Oftálmica
Vía nasal y otal
Vía gargarismo
Vía intrauterina
Tabla de padecimientos y dosificación
Dosificación infantil
Otras aplicaciones
Recomendación
TERCERA FASE Suministro de agua






EL CONTENIDO NUTRICIONAL
DE LOS ALIMENTOS

IMPORTANCIA DE LOS ALIMENTOS

REQUERIMENTOS

METABOLISMO

DEFICIENCIAS

SOLUCION




INTRODUCCION

La vida se mantiene gracias a un complejo conjunto de reacciones químicas, que en los seres humanos son factibles gracias a su fuente primordial e energía: EL ALIMENTO.
Así como existe en el mundo una repartición desigual de los energéticos, lo mismo sucede con los alimentos. Mientras que en los países desarrollados se discute acerca de la bondad o ineficacia que representan loa aditivos alimenticios y el uso de plaguicidas, en los países subdesarrollados docenas de millones de niños mueren por desnutrición anualmente.
Se estima que el 30 por ciento de la población de estados Unidos tiene un sobrepeso, lo cual no es una virtud, sino un defecto, pues estos individuos son m{as propensos a presentar problemas cardiacos, entre otros males.
En tanto, en gran parte de los países pobres la ingestión de proteínas es un lujo ocasional, por lo que al ser restringida y de escasa calidad, en dichas poblaciones, suelen aparecer síntomas de carencia proteínica especialmente entre los niños, los cuáles necesitan gran cantidad de proteínas durante su crecimiento.
Por lo que respecta a México, se lleva un estilo de alimentación que se ha heredado de generación en generación y se sigue usando en las familias por costumbre.
Se utilizan los productos alimenticios como: el chile, maíz, fríjol, arroz, papa, tomate, jitomate, nopal, verdura, etc., y se elaboran alimentos como: tortillas, tamales, enchiladas, sopes, tacos, postres, chile con carne, el azúcar en forma de chocolate, refrescos embotellados, dulces, etc., estos alimentos proporcionan carbohidratos en exceso, pero se percibe la deficiencia de proteínas, o sea que son alimentos con muy bajo contenido nutricional.
Entonces el mexicano no tiene una dieta balanceada, en consecuencia, es más vulnerable a las enfermedades cardiovasculares, hipertensión, arteriosclerosis, nefritis, diabetes, obesidad, colitis, indigestión, hemorroides, gripes, etc.
Por el tipo de alimentación, el mexicano tiene un desarrollo físico incompleto es menos resistente a las fatigas y se vuelve poco productivo. En la escuela, el niño mal alimentado refleja un bajo aprovechamiento escolar.
Según se evidencia, la alimentación en los países desarrollados y subdesarrollados se distingue por la disponibilidad de los alimentos, sin embargo, se manifiesta en común una clara falta de cultura alimentaría con la correspondiente aparición de enfermedades, o sea, que estas son la consecuencia de una debida alimentación.
Por ello y con justa razón, desde la antigüedad Hipócrates estableció “QUE NUESTRO MEJOR MEDICAMENTO SEA NUESTRO ALIMENTO”, es decir, que si al organismo se le nutre adecuadamente, este gozará de una perfecta salud y más aún, si se modifican los malos hábitos alimenticios, el organismo estará en la capacidad de producir absolutamente todo lo que requiere para su funcionamiento y por ende de auto recuperarse y en consecuencia prescindir de los medicamentos.
El mundo actual, reclama un cambio para el nuevo milenio en el cual, se realizará la mayor transformación de la historia humana, sin la que será imposible lograr cualquier otra forma de calidad.


CAPITULO I
IMPORTANCIA DE LA ALIMENTACION

En la actualidad se ha determinado que existe una estrecha relación entre el nivel de desarrollo de un país y el grado nutricional de su población, pues, en la medida que ésta disponga de una alimentación adecuada, sus habitantes serán más sanos, más fuertes y más pensante, y por ende su progreso tecnológico y productivo estará asegurado.
Ante ésta premisa, institucionales como la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación), se preocupan por difundir este concepto, enfatizando sobre todo los efectos de la nutrición en la salud.

¿Qué es la nutrición?

La TAO, la define como: El conjunto de funciones orgánicas, mediante las cuales el alimento es transformado y adaptado para el crecimiento y la actividad del ser humano.
¿Qué función desempeña el alimento en el organismo?
El alimento, que esencial para disponer de la energía necesaria para vivir, cumple tres funciones básicas en el organismo:

Proporciona energía para que el cuerpo lleve a cabo las actividades de relación , con andar, correr o jugar y para que se efectúen los procesos vitales; es decir, para que todos los órganos funcionen correctamente.
Contribuye con el material necesario para asegurar el crecimiento del cuerpo, así como la renovación y reparación de sus diversos tejidos.
Aporta las sustancias necesarias para la regulación de la actividad química que se da en el organismo y que se conoce con el nombre de METABOLISMO.


¿Qué trayectoria sigue el alimento en el organismo?

El alimento, una vez introducido en el organismo, pasa por el tubo digestivo (boca, esófago, estomago, e intestino delgado) y en ese trayecto es sometido a la acción de las enzimas y los jugos digestivos con el objeto de desdoblar a los componentes básicos (puesto que así como se ingieren no pueden ser aprovechados por el organismo, dado que, son moléculas demasiado grandes para que las paredes del intestino puedan absorberlas) en pequeñísimas partículas que ya resultan de fácil asimilación.
Situado en la vía que sigue la gran mayoría de la sangre procede del tubo digestivo a través de la vena porta, el hígado, recibe directamente los productos de la digestión tal como son absorbidos, transformándolos y sintetizándolos.
La actividad del hígado puede ser comparada a la de un complejo laboratorio metabólico, que se encarga de absorber, sintetizar, degradar o modificar de diversas maneras a los bioelementos energéticos y plásticos del organismo, de acuerdo con las necesidades de éste.


CAPITULO II
REQUERIMIENTOS

¿Cuáles son os componentes del alimento?


Un alimento está formado por los seis componentes que a continuación se describen, siendo estos, los que nuestro organismo requiere exclusivamente para su trabajo, no necesita de más:

COMPONENTES BASICOS

GRASAS
CARBOHIDRATOS
PROTEINAS

COMPLEMENTOS ALIMENTICIOS

MINERALES
VITAMINAS
AGUA


Según se observa, a los tres primeros se les denomina “componentes básicos” debido, a que son los fundamentales para el trabajo del hígado y para la bioquímica d que se genera en el organismo, además, son compuestos que deben ser modificados (digeridos) necesariamente antes de ser absorberse.
A los segundos, se les llama “complementos alimenticios” debido, a su acción catalizadora (activan e inhiben) en las reacciones químicas que se suceden, por la actividad de los componentes básicos, asimismo, son sustancias que pueden absorberse directamente (de ordinario, en el intestino, pero también en estómago, incluso en la boca) sin que su estado original sufra cambio alguno.

Cabe hacer mención, que todo compuesto para poder asignarle el nombre de “alimento”, como mínimo, deberá contener a los tres componentes básicos (grasas, carbohidratos y proteínas).


CAPITULO III
METABOLISMO

¿Qué función realizan los componentes del alimento en el organismo?

GRASAS (Lípido)

Las grasas que se ingieren, al pasar por el estómago, son sometidas a la acción del jugo gástrico, el cuál, está compuesto básicamente por ácido clorhídrico y dos enzimas: la pepsina y la lipasa; aquí, las grasas experimentan una primera transformación en ácidos grasos , por la acción muy poco importante de la lipasa, sin embargo, ésta misma encima, que es secretada también por los jugos intestinales y pancreáticos, conjuntamente con el jugo biliar, continúan la transformación de las grasas en el intestino delgado hasta convertirlas en ácidos grasos y glicéridos, de esta forma atraviesan la pared intestinal y una parte ( la menor), se dirige hacia el hígado y la parte ( la mayor), pasa a los vasos linfáticos, para formar el tejido adiposos, que es, la capa de grasa que protege a huesos y músculos, sirve como aislante térmico (para soportar las variaciones de temperatura del ambiente) y que además, actúa como fuente de reservas, ya que, en épocas de austeridad el organismo recurre a éstas, y el hígado, a partir de las grasas puede sintetizar (elaborar) a los carbohidratos y las proteínas, debido a que, los componentes básicos están formados por elementos químicos comunes, como se indica a continuación:



COMPONENTES ELEMENTOS QUIMICOS CONSTITUYENTES

GRASAS CARBONO, HIDROGENO Y OXIGENO
CARBOHIDRATOS CARBONO, HIDROGENO Y OXIGENO
PROTEINAS CARBONO, HIDROGENO, OXIGENO, NITROGENO, FOSFORO Y AZUFRE.

Según se observa, los tres componentes básicos están constituidos por carbón, hidrógeno y oxigeno, la diferencia la hacen las proteína, en que además de estos tres, tienen nitrógeno, que es su principal característica, y solo unas cuantas tienen fósforo y azufre.
De suyo, el ser humano constituye un verdadero laboratorio químico, ya que, su peso corporal está conformado por 64.4% de oxígeno, 17.6% de carbón, 10% de hidrógeno, 3% de nitrógeno y 5% de minerales.
Es por esta razón que hígado a partir de cualquiera de los tres componentes básicos, puede sintetizar (laborar) a los otros dos componentes; por ésta razón, una persona puede realizar una huelga de hambre y durar varios días sin ingerir alimento, pues gracias a la actividad sintetizadora del hígado ( que recurre a las reservas de grasas) puede sobrevivir.


CARBOHIDRATOS O HIDRATOS DE CARBONO (Glúcidos)

Los carbohidratos, también llamados hidratos de carbono o Glúcidos, son azúcares y almidones que se ingieren de la siguiente manera:



Harina

Almidones

Pastas

CARBOHIRATOS

De la caña

De la fruta

Azucares

De la leche

De la miel



Los carbohidratos químicamente se clasifican como sacáridos y van desde polisacáridos (muchos azúcares, como el almidón) hasta monosacáridos (un solo azúcar, como la glucosa).
Cuando se ingieren carbohidratos, estos se desdoblan en el trayecto del tubo digestivo en dos etapas mediante la actividad de las encimas. La primera etapa, se inicia con la acción de una enzima llamada tialina, contenida en la saliva, que reduce las moléculas grandes de almidón y las transforma en azúcares que son más fácilmente asimilables, pasando por el estómago sin experimentar más transformaciones, pero al llegar al duodeno (primera parte del intestino delgado), son sometidos a la actividad de las enzimas del jugo pancreático (la amilasa y la maltasa) que terminan por descomponer a los carbohidratos en el azúcar más sencillo (un monosacárido) que es la glucosa, y es de ésta manera en que llega al hígado, ‘este a su vez la almacena en forma de glucógeno (unión de varias moléculas de glucosa), y él mismo se encarga de suministrarla a través del torrente sanguíneo, para que ésta vaya y penetre en cada una de las células, y al hacerlo se combine con el oxígeno de los eritrocitos (glóbulos rojos), produciéndose la siguiente reacción en el organismo:


C6H12O6 + 6O2 6CO2 + 6H2O + ATP

Glucosa + Oxígeno Bióxido de Carbono + Agua + Energía


Según se observa, la combinación de glucosa y oxígeno, va a producir bióxido de carbono, agua y ENERGÏA, siendo ésta última la que se desprende de la reacción, y es la que permite precisamente desarrollar trabajo, puesto que, si no llevara a cabo ésta reacción de combustión ene el organismo, simplemente éste se asemejaría a un muñeco inanimado.
De suyo cuando se manifiesta sueño, desgano y falta d energía, es porque no se está llevando a cabo adecuadamente dicha reacción. De aquí se concluye, que los carbohidratos al igual que las grasas sirven específicamente para proporcionar ENERGIA.

PROTEINAS (Prótidos)
Una vez el alimento ingerido, se encuentra en el estómago, se mezcla con el jugo gástrico que es fuertemente ácido, siendo éste el que hidroliza (rompe) las moléculas de proteína lentamente; pero además, contiene una enzima llamada pepsina, que acelera la hidrólisis 8el rompimiento o separación) de las proteínas en ciertos puntos de sus moléculas, convirtiéndolas en aminoácidos que son los componentes de las proteínas.
En la cadena (o cadenas) de aminoácidos (componentes de las proteínas) condensadas, dos unidades vecinas están unidas por lo que se llama enlace peptídico. El ácido ordinario como el que hay en el estómago hidroliza cualquier enlace peptídico, pero la pepsina solo rompe los enlaces que se forman entre determinados aminoácidos.
Debido a las diferentes acciones del ácido y la pepsina, las moléculas proteicas abandonan el estomago y entran al intestino, en forma de cadenas de aminoácidos fragmentadas, pero todavía bastante largas, aunque de longitud relativamente breve comparada con las de las proteínas que reciben el nombre de péptidos.
En el primer tramo del intestino delgado, los péptidos se mezclan con el jugo pancreático, en el que hay dos enzimas que, por catalizar (provocar) la hidrólisis (el rompimiento) de los enlaces peptídicos de las proteínas, igual que la pepsina, reciben el nombre de proteasas. Estas dos enzimas son la tripsina y la quimotripsina. Igual que la pepsina, cada una de ellas solo realiza la hidrólisis (el rompimiento) de determinados enlaces peptídicos.
Sin embargo, los enlaces rotos por la tripsina y la quimotripsina no son los mismos que la pepsina ataca. Más aún, la tripsina desdobla distintos enlaces de los que hidroliza (rompe) la quimotripsina.
El resultado es, que los enlaces peptídicos que capearon impunemente la tormenta mientras tuvieron que lidiar solo con la pepsina y el lento efecto del ácido gástrico, sucumbe rápidamente a los ataques de las enzimas pancreáticas.
Antes que la comida pase a porciones inferiores del intestino delgado, las cadenas peptídicas han sido reducidas a pedazos formados por dos, tres o cuatro aminoácidos. El propio jugo intestinal contiene una gran variedad de catepsínas, que son enzimas especialmente diseñadas para atacar a esos pequeños péptidos, que son unidades más sencillas, los cuáles, acaban por ser absorbidos por las paredes intestinales y a través de la vena porta se dirigen al hígado.
El hígado, absorbe los aminoácidos y los agrupa para formar moléculas de proteínas, es decir, el hígado es fábrica de proteínas, siendo éstas, las que ahora si va a utilizar nuestro organismo, y no las que ingerimos.
Las proteínas elaboradas por el hígado, no son simples colecciones de aminoácidos unidos entre si de cualquier manera, sino que contienen determinadas proporciones de cada uno de los veintidós aminoácidos que existen en la naturaleza. Por así decirlo, las células del hígado (las versátiles e increíblemente atareadas obreras) cuidadosamente unen los aminoácidos y fabrican proteínas, que envían a la sangre como si fueran paquetes de comida completa y bien equilibrada para los diferentes requerimientos del organismo, en forma resumida se pueden describir los diferentes usos a los que se destinan las múltiples proteínas elaboradas por el hígado, de la siguiente manera:
De lo anterior, se infiere la vital importancia que tiene, el trabajo que desarrolla el hígado en el manejo y combinación de los veintidós aminoácidos (componentes de las proteínas), de los cuales, el hígado tiene la capacidad de sintetizar la mayor parte e ellos, según se indica a continuación:

14 aminoácidos son sintetizados (elaborados) por le Hígado.

PROTEINAS
Veintidós aminoácidos

8 Aminoácidos esenciales, que son indispensables en la dieta.

Por lo antes expuesto, se establece que el hígado tiene la facultad de elaborar, catorce de los veintidós aminoácidos totales, a partir e las grasas y los carbohidratos, es decir, sin que estos sean ingeridos. Pero los ocho aminoácidos restantes, esos no los puede sintetizar (elaborar) el hígado, y por ello estos resultan indispensables en la dieta, identificándolos en la siguiente lista, en la que describen, todos los aminoácidos constituyentes de las proteínas:

Glicina
Asparagina
*Fenilalanina
Alanina
Ácido Glutámico
Tirosina
*Valina
Glutamina
*Triptófano
*Leucina
*Licina
**Histidina
Isoleucina
Arginina
Prolina
Serina
Cisteína
Hidroxiprolina
*Treonína
Cistina

Acido Aspártico
*Metionina



*Aminoácidos esenciales, indispensables en la dieta de los adultos.
*En el niño y adolescentes, dos mas que son imprescindibles en el crecimiento.

Los aminoácidos esenciales, como su nombre lo indica, son imprescindibles en todo el régimen alimenticio, pues por así decirlo, son eslabones en las cadenas de proteínas y la carencia de ellos va a ocasionar, que el hígado no pueda armar cadenas completas de proteínas, al quedar estas truncas, originando una gran cantidad de desechos, producto del mal metabolismo del hígado.


Cadena de proteína:

CON AMINOACIDOS ESENCIALES

CADENA COMPLETA

SIN AMINOACIDOS ESENCIALES

CADENA INCOMPLETA


En ésta última situación, la cadena de proteína queda trunca por falta de los aminoácidos esenciales; es ésta circunstancia, cuando el hígado produce muchos desechos, a esto se le conoce como: PROBLEMAS DE METABOLISMO.
Lo anterior, se ilustra con otro ejemplo más, imaginar que cada una de las letras del abecedario son aminoácidos y que las palabras que se pueden formar con éstas son proteínas, por consiguiente:

¿Cuántas palabras (proteínas) se podrían formular con veintidós letras (aminoácidos)?

La respuesta sería: CIENTOS DE MILES, pues de igual manera, el hígado, con veintidós aminoácidos puede elaborar miles de proteínas.
Volviendo al ejemplo de las letras ¿ Qué sucedería si a esa cantiad de letras se le quitaran las cinco vocales? Pues que simplemente ya no se podrían construir palabras completas.
Imaginar que la palabra GUADALAJARA es una proteína, que cada letra es un aminoácido y que cada vocal corresponde a un aminoácido esencial:



PROTEINAS

Con Aminoácidos Esenciales


PROTEINA COMPLETA

G U A D A L A J A R A


Sin Aminoácidos Esenciales


PROTEINA INCOMPLETA


G D L J R A


Así también, el hígado, sin los ocho aminoácidos esenciales, no puede fabricar proteínas completas, y por ende no podrá abastecer de ellas al organismo, afectando en consecuencia a los diversos sistemas (nervioso, hormonal, digestivo, circulatorio, inmunológico, enzimático, etc.), a esto es a lo que se le denomina PROBLEMAS DE METABOLISMO, provocados por una alimentación deficiente en dichos aminoácidos, y dado que los mismos resultan indispensables en la dieta, es necesario recurrir a alimentos que los contengan, por ejemplo: la carne, las leguminosas y oleaginosas (haba, alberjón, garbanzo, soya, lenteja, amaranto, cacahuate, nuez, quinua, alubias, algas, etc.).
Desafortunadamente se carece de una cultura alimentaría, ya que tradicionalmente se ha enseñado a comer para llenar y no para nutrir, siendo éstas dos cosas totalmente diferentes, y peor aún, la actual sociedad de consumo induce a comer sabroso (enlatados, embutidos, refinados y chatarra, preparados con conservadores, colorantes y saborizantes artificiales) sin importar el daño que se ocasiona al hígado.


FUENTES NUTRITIVAS DE COMPONENTES BASICOS

Siempre que se menciona la palabra DIETA, se piensa que se ésta hablando de una rutina de adelgazamiento o de dietas especiales para personas enfermas.
Sin embargo, el término dieta, tiene un sentido más amplio ya que incluye los diferentes tipos de alimentos que se deben consumir cada día, para proporcionar al organismo todos los nutrientes que necesita.
A continuación se describen las principales fuentes de componentes básicos, mismas que puede servir de guía nutricional.
En esta tabla se relacionan las cantidades, de las sustancias nutritivas contenidas en cada cien gramos de los principales alimentos, con el aporte energético, expresado en kilocalorías (Kcal.) que proporciona cada uno de ellos.



TABAL NUTRIMENTAL DE COMPONENTES BASICOS.

ALIMENTOS
(100 GRS.)
PROTEINAS
(grs.)
GRASAS
(grs.)
CARBOHIRATOS
(grs.)
ENERGIA
(GRS.)
Cereales y tubérculos:
Arroz Pulido Blanco
Pan Blanco e Trigo
Patatas (enteras)

7.2
9.3
2.8

0.6
0.7
0.2

79.7
64.6
18.2

364
307
79
Leguminosas y algas:
Garbanzos
Lentejas
Alubias
Soya
Quinua
Amaranto
Chorella

18.2
23.7
2.0
35.0
22.5
22.0
15.0

6.2
1.3
1.6
18.0
22.6
10.2
3.0

61.1
60.7
60.8
47.0
30.2
29.5
20.1

364
340
337
380
244
238
162
Frutos secos:
Nuez de Nogal
Avellana
Cacahuate (tostado)
Almendra

13.7
10.8
28.8
18.6

67.2
63.2
46.9
54.1

13.2
19.8
18.1
19.6

664
647
566
547
Frutas, Verduras y Hortalizas:
Plátano
Uva
Ciruela
Naranja Dulce
Melocotón Amarillo
Guisante
Judía Verde
Espinaca


1.0
0.6
0.6
0.8
0.6
7.6
2.0
2.8


0.3
0.7
0.2
0.2
0.1
0.4
0.2
0.7


32.3
16.7
11.9
10.5
9.7
21.0
6.6
4.9


122
68
47
42
38
97
36
30

¿Cuántas calorías necesitamos?

Es necesario conocer la cantidad de calorías que proporcionan los alimentos.
La caloría, es una unidad de medida de la energía suministrada por la comida. Pero la caloría es una unidad de medida muy pequeña. Por ello, para saber la cantidad de energía que podemos obtener de cada grupo de alimentos, se utiliza como unidad de medición la kilocaloría, que equivale a mil calorías, y su símbolo es Kcal.
Un adolescente que realice una actividad normal, necesita entre dos mil y dos mil quinientas Kcal. Diarias, y un adulto con un trabajo sedentario, entre dos mil quinientas y tres mil Kcal. Pero las necesidades aumentan si se realiza un trabajo pesado o un ejercicio físico intenso, entre cuatro mil y cinco mil Kcal. Y si se vive en un clima frío, entre cinco mil y seis mil Kcal. Diarias.
Un esquimal por ejemplo, gasta más energía que una persona que vive en un clima templado.

COMPLEMENTOS ALIMENTICIOS.

Con este nombre, se designa a los minerales , las vitaminas y el agua, debido a la función que desempeñan en el metabolismo del alimento, de acuerdo a sus respectivas propiedades, pues los tres actúan como catalizadores que activan o inhiben todas las reacciones químicas que se llevan a cabo en el organismo, y en el caso del agua además, es el mejor solvente de todas las sustancias comunes.

4) MINERALES

Hace millones de años, los procesos de enfriamiento de la tierra provocaron que el agua que se encontraba en la atmósfera como vapor, se condensara, precipitándose en forma de lluvias torrenciales, que fueron disolviéndose grandes cantidades de minerales de la superficie terrestre y se fueron acumulando en las oquedades, formando así los primeros océanos.
Según se aprecia en esta reseña, los minerales se encuentran presentes en el organismo, esencialmente en la misma forma en que se hallan en el reino mineral.
También suele llamárseles: sustancias inorgánicas, porque no se necesita del concurso de un organismo vivo para su fabricación.
Actualmente, se conoce el planeta tierra, la luna. Los astros y las estrellas, los animales, las plantas y los minerales; sin embargo, solo unos pocos conocen los elementos de los que depende nuestra salud. Ello puede radicar en el hecho de que, lamentablemente, no se presto en su momento la debida atención a la investigación de estos diminutos agentes beneficiosos con propiedades curativas que se hallan en los alimentos. Mientras que a principios del siglo pasado ya se disponían de profundos conocimientos acerca de los efectos de las vitaminas y la importancia que tenían para el organismo humano, no fue entonces que la ciencia comenzó a saber de la existencia de los minerales y los oligoelementos. Fue hasta el último tercio del siglo anterior, que creció el interés por estos elementos y se empezó a estudiar su alcance y sus beneficios.
Hoy se sabe que el organismo requiere aproximadamente de unos dieciocho minerales y oligoelementos como parte constituyente de la alimentación.
El ser humano constituye un verdadero laboratorio químico. Una persona de aproximadamente 70 Kg. De peso, está compuesto por 45.1 Kg. De oxígeno, 2.3 Kg. De Carbono, 7 Kg. De hidrógeno, 2.1 De nitrógeno y 3.5 Kg. De sales minerales. Aunque estos últimos constituyentes representan una pequeña cantidad (aproximadamente un 5 % del peso corporal total), el componente mineral, no obstante, es indispensable para la vida, ya que sin estos elementos no pueden darse los procesos vitales.
Se requieren éstas sustancias como elementos constituyentes para el crecimiento de los huesos, los dientes, el cabello, la piel y las uñas. Son material combustible para el corazón y la circulación, los músculos y el cerebro. Transportan el oxígeno, las vitaminas, las hormonas y las enzimas. Como si de una especie de policía se tratara, regulan la circulación de los fluidos, y son los electrolitos que trasmiten señales eléctricas de célula a célula. Proporcionan el equilibrio ácido/básico adecuado y son necesarios en la síntesis de las hormonas. Los minerales y los oligoelementos, en cantidades minúsculas, suelen asegurar el equilibrio indispensable entre los diferentes procesos vitales, como la digestión, el metabolismo, la excreción o la reproducción.
El hecho de que se trate de un mineral o de un oligoelemento depende de su cantidad. Así, pues, los científicos hablan de MINERALES cuando se refieren a elementos que se hallan en cantidades mayores, tales como: el potasio (K), el cloro (Cl), el magnesio (Mg), el fósforo (P), el calcio (Ca) y el sodio (Na). Estas sustancias constituyen la proporción principal del 5 % del peso corporal, en comparación con los oligoelementos, que en total no presentan más de 10 gramos.
Entre los OLIGOELEMENTOS, cuya importancia ha sido estudiada hasta la actualidad se cuentan: el hierro (Fe), el yodo (I), el manganeso (Mn), el cromo (Cr), el flúor (F), el cobalto (Co), el cobre (Cu), el molibdeno (Mo), el níquel (Ni), el selenio (Se), el silicio (Si) y el zinc (Zn).
Al parecer, sustancias tan tóxicas como el alumino (Al), el arsenio (As), el plomo (Pb) y el cadmio (Cd), pueden ser indispensables en cantidades minúsculas.
Como su propio nombre lo indica, los oligoelementos, son una palabra compuesta por elemento y oligo (que en griego significa poco), se hallan en cantidades muy pequeñas, que se miden en microgramos (millonésimas de gramo). Sin embargo, como constituyentes de nuestra alimentación resultan esenciales para estimular nuestras funciones vitales.
Los minerales y los oligoelementos, son sustancias inorgánicas biológicamente activas (Metales, semimetales y minerales) que proceden del suelo y del agua; en la naturaleza se hallan principalmente en forma de sales. Dado que el organismo no puede sintetizarlas (elaborarlas) por si mismo, se tiene que incluir en la alimentación durante toda la vida. En principio, esto no constituye ningún problema, puesto que el ser humano es tanto carnívoro como herbívoro. Las plantas son los únicos organismos que asimilan las sales minerales del suelo por vía directa. Los animales se alimentan primordialmente, de plantas y acceden de este modo a estos valiosos elementos.

¿PORQUE SON TAN IMPORTANTES LOS MINERALES?

Indudablemente que en la actualidad el estilo de vida, las condiciones laborales así como el estrés dan lugar a enfermedades que antes no se conocían. No solo en las personas de avanzada edad, sino también en niños y lactantes se han observado indicios de que una de las causas de estos cuadros de enfermedad podría encontrarse, en determinadas circunstancias en trastornos del metabolismo de los minerales y los oligoelementos.
Hasta ahora, las obras acerca de las sales minerales únicamente trataban la presencia y el aprovechamiento de éstas biosustancias en el organismo. No obstante a sus efectos son mucho más complejos, así pues, los minerales y los oligoelementos no solo interactúan entre si sino también con las vitaminas y las proteínas.
Las reacciones que restablecen el equilibrio y los ciclos de regulación, son características del funcionamiento del organismo. La carencia de un mineral altera, por tanto, no solo las funciones de las que es responsable, sino que también afecta a los ciclos que regulan otros mecanismos.
A continuación se describen las principales funciones de los minerales en el organismo:

Calcio.- Junto con el fósforo, confiere a los huesos y dientes su dureza. En este sentido, los tejidos óseos y los dientes también almacenan calcio en previsión de posibles periodos de carencia. Asimismo, los iones de calcio regulan la contracción del músculo y por tanto; la frecuencia cardiaca. Colabora también con los factores de coagulación de la sangre.

Zinc.- Interviene en todos los procesos metabólicos, la síntesis de las hormonas y la estabilidad de los tejidos. Estimula las propias defensas del organismo, ene especial durante el envejecimiento. Favorece el crecimiento de los tejidos, sobre todo el del cabello. Reacciona con metales pesados como el cadmio, el plomo o el mercurio, con lo que anula su toxicidad y se encarga del transporte y la absorción de la vitamina A.

Cloro.- Integrante de los jugos gástricos y el líquido cefalorraquídeo. Su función consiste en eliminar bacterias e intervenir en la digestión de las proteínas. En combinación con el sodio y el potasio, regula la presión osmótica del plasma sanguíneo.

Cobalto.- Constituyente de la vitamina B12 y participa activamente en la producción de los glóbulos rojos de la sangre.

Cobre.- es componente esencial de las enzimas y participa en la síntesis de glóbulos rojos, asistiendo en la fijación del hierro en la hemoglobina.

Cromo.- Ayuda a mantener el nivel adecuado de azúcar y de colesterol en la sangre.

Flúor.- Interviene en el endurecimiento de los dientes y huesos y en la formación de músculos, ligamentos, el tejido conjuntivo, la piel y él cabello.

Fósforo.- forma parte junto con el calcio, de los huesos y dientes y participa en la producción y la transferencia de energía en el organismo a partir de los alimentos.

Hierro.- Indispensable para el transporte de oxígeno de los pulmones hasta los diferentes órganos, como el corazón, los músculos, el hígado o él cerebro. Incrementa la resistencia ante las enfermedades, previene los estados de fatiga y elimina la anemia.

Magnesio.- Participa activamente en el metabolismo de las proteínas, grasas y carbohidratos. Es necesario para el rendimiento de los músculos, y en especial, del músculo cardiaco. Es responsable de que el conjunto del sistema nervioso y las células del hígado funcionen con normalidad.

Manganeso.- interviene en el metabolismo de los carbohidratos y las grasas, en la formación y el mantenimiento de los huesos, dientes y el tejido conjuntivo. Es componente de las enzimas y coenzimas, además se encarga de la degradación de las sustancias tóxicas presentes en el hígado, antes de que puedan resultar nocivas.

Molibdeno.- es responsable de que los productos de desecho de la utilización de proteínas, se transformen en ácido úrico y de que sean excretados. De esta forma, impide que se produzca depósitos molestos de cristales de ácido úrico en las articulaciones, las cápsulas sinoviales y los tendones. Activa las enzimas hepáticas que, degradan el alcohol.

Níquel.- Afecta e incrementa la acción de diferentes hormonas. Ejerce una acción estabilizadora en la coagulación de la sangre y activa una serie de enzimas que participan en el metabolismo de los carbohidratos. Favorece la absorción del hierro y disminuye la acción de la adrenalina.

Potasio.- Regula la frecuencia cardiaca y es responsable del correcto funcionamiento de músculos y nervios junto con el sodio regula las necesidades de agua: el sodio se asocia con el agua, el potasio la expulsa. Activa diversas enzimas e influye en la síntesis de proteínas y contribuye a disminuir la presión arterial.

Selenio.- Protege el organismo de los radicales libres y de radiaciones ambientales perjudiciales e infecciones víricas y bacterianas, reforzando así al sistema inmunológico. Actúa contra las alergias químicas, aumenta la fertilidad y favorece la función celular, hepática, muscular y pancreática.

Silicio.- Se encarga del correcto funcionamiento del metabolismo en el tejido conjuntivo. Interviene en la composición estructural de las proteínas, confiere consistencia y elasticidad a los tejidos lo que se traduce en una piel más tersa y suave. Participa en el depósito del calcio en los huesos y refuerza al sistema inmunológico activando, a los fagotitos del organismo. Asiste en la curación de heridas, las secreciones de las llagas, quemaduras externas, así como los procesos inflamatorios internos.

Sodio.- Una tercera parte del conjunto de reservas de sodio se halla en los huesos, el resto del sodio y el cloro forman parte de los fluidos del organismo. El intercambio de sodio y potasio es vital para la función de las células nerviosas y musculares. Influye en la absorción de la glucosa y los aminoácidos por las células, puede estimular procesos químicos vitales mediante la activación de enzimas, asiste en la digestión y forma parte de los huesos.


Yodo.- La tiroides precisa de yodo para las hormonas T3 (triyodotironina) y T4 (tiroxina), encargadas de regular varias funciones vitales de nuestro organismo.

Los minerales pueden ser obtenidos de alimentos como: agua, productos lácteos, verduras, huevo, hortalizas, plátano, pescados, leguminosas, mariscos y algas.

5) VITAMINAS

Las vitaminas son compuestos orgánicos, necesarios para el correcto funcionamiento del organismo en pequeñas cantidades, utilizándose fundamentalmente como coenzimas (componente no proteico de una enzima que interviene en la reacción catalizada por ésta), o para la síntesis (elaboración) de las mismas.
Las vitaminas deben tomarse con la ingestión, ya que el organismo no las puede sintetizar (elaborar).
Todos los seres vivos (el ser humano, microorganismos, plantas y animales), tienen la necesidad de vitaminas (factores de crecimiento) para poder crecer y sobrevivir.
El suministro de vitaminas que debe estar asegurado por la dieta alimenticia, varia de unas especies a otras. Las plantas verdes fabrican las coenzimas que necesitan para si mismas.
Respecto a todas las demás clases de seres vivos, muchas especies deben recibir con la alimentación una o más vitaminas, otras no. En realidad, mientras que algunas vitaminas deben ser introducidas como tales en la alimentación, otras se toman en forma de precursores (provitaminas), finalmente, algunas vitaminas necesarias para un cierto individuo, son sintetizadas por los microorganismos que se hallan en el intestino formando parte de su flora intestinal. La carencia de una vitamina, si se prolonga bastante provoca la aparición de la correspondiente avitaminosis. La administración de una vitamina en cantidad excesiva, frecuentemente por empleo terapéutico erróneo, puede causar una hipervitaminosis.
Las carencias parciales causan una hipovitaminosis. En todos los casos, se habla de desvitaminosis término que no obstante, también se emplea con diverso significado, es decir, para indicar una condición de carencia de los distintos factores vitamínicos, causada por incapacidad del organismo para absorber o utilizar las vitaminas introducidas.
Las vitaminas por sus propiedades físicas de solubilidad, se subdividen, generalmente en dos grupos:

a) Vitaminas Hidrosolubles: C, B1, Niacina, B2, B6, Biotina, Acido Fólico, B12, Acido Pantotético.
b) Vitaminas liposolubles: A, D, E, K, F.

Muchas de las vitaminas hidrosolubles entran a formar parte de las coenzimas.


Se da el nombre de antivitaminas a algunos compuestos químicos que contrarrestan la acción de una vitamina, por antagonismo (antimetabolitos), o bien que impiden su absorción o utilización.
Los alimentos que aportan las vitaminas hidrosolubles son: carne de cerdo, lentejas, pan integral, vegetales, huevo, leche, aguacate, salvado, pescado, hígado y riñón de ternera, legumbres, levadura de cerveza, fresas, grosellas negras, naranja, limón, tomates y pimientos (picante).
Por otra parte, los alimentos que proporcionan las vitaminas liposolubles son: tomates, zanahorias, queso, huevo, aceite de hígado de bacalao, crema de leche, espinacas y coliflor.

6) AGUA

El agua es el común denominador general de la vida. Las reacciones químicas que se tienen lugar en los tejidos vivos, ocurren entre moléculas que están flotando en agua, o que, están colocados a lo largo de una membrana bañada por agua. Con frecuencia, tales reacciones involucran a las propias moléculas de agua.
Esto no debe sorprendernos, pues la vida empezó en el mar y nunca lo ha abandonado, por dentro, todavía somos océano.
Los únicos tejidos del cuerpo que contienen poco agua son: el adiposo (grasa) y el esquelético (huesos). Estos tejidos sólo tienen un veinticinco por ciento de agua, sin embargo, tanto la grasa como el esqueleto son poco activos, esto no quiere decir que no estén vivos o que no pase nada en ellos, simplemente, es que en ellos hay menos actividad que en los otros tejidos del cuerpo. En el tráfico furioso de la química vital, la grasa y los huesos representan calles relativamente tranquilas.
La sangre parece encontrarse en el extremo opuesto, además, como es líquida, podría suponerse que contiene más agua que los demás tejidos, en realidad, esto no es estrictamente cierto.
Dejando a un lado el tejido adiposo y el esqueleto, las demás partes del cuerpo tienen setenta y ochenta y cinco por ciento de agua. La sangre tiene un poco más de agua que el promedio (ochenta por ciento); el corazón y los riñones también tienen ochenta por ciento de agua y estos tejidos “sólidos”.
En realidad, el tejido más acuoso en el cuerpo es uno “sólido”, la sustancia gris del cerebro, ya que el ochenta y cinco por ciento de ella es agua.
Si la sangre solo sirviese para mover las células hemáticas de un lugar a otro, cualquier otro líquido podría desempeñar esa función.
Si la vida se hubiese desarrollado en un océano constituido por otro líquido en lugar de agua (en el supuesto caso, que tal cosa fuera posible), ese líquido estaría llenando las funciones del agua con igual eficacia.
Sin embargo, la sangre realiza otras muchas funciones y por diversas razones, no existe ningún otro líquido que pudiera desempeñarlas tan bien, como el agua.
Por ejemplo, el agua es el mejor solvente de todas las sustancias comunes; es decir, disuelve a la mayor cantidad de compuestos sin dañar sus moléculas comunes; es decir, propia experiencia que, entre las sustancias que se disuelven fácilmente en el agua, se cuentan: la sal de mesa, el bicarbonato de sodio, el azúcar, y el alcohol. Hay miles más que se disuelven igual de bien; y otras que disuelven solo ligeramente, pero lo suficiente para ser tomadas en cuenta.
El resultado es que el líquido acuoso de la sangre, lleva al circular, toda clase de sustancias disueltas, además de las células. En ningún otro líquido podrían transportarse tantas sustancias, y por lo tanto, ningún otro fluido permitiría que se llevaran a cabo tantas reacciones distintas, ni que diera a los tejidos tanta versatilidad química.
El agua, es imprescindible en nuestro organismo, ni la respiración celular, ni la asimilación por parte de las células de las sustancias nutritivas de los alimentos pueden llevarse a cabo, o realizarse de modo suficiente, cuando las necesidades de agua del organismo no están cubiertas.
El agua contribuye también, a la absorción en el intestino, transporta diluidos en la sangre: a los carbohidratos, las grasas, las proteínas, los minerales y las vitaminas de los alimentos, y expulsa al exterior con la orina y el sudor productos de desecho.
Dada la necesidad que nuestro organismo tiene de agua para realizar la mayor parte de las funciones vitales, no es extraño, que la sed, sea un estímulo más fuerte que la sensación de hambre.
Nuestro organismo, para eliminar toxinas, lo hace a través del sudor, de la orina y el excremento. De aquí la gran importancia de ingerir diariamente, una cantidad considerable de agua (aproximadamente tres litros al día).
Al ingerir agua, se van a activar las glándulas sudoríparas y a través del sudor se van a expulsar toxinas; si se toma agua se van a limpiar los riñones, en consecuencia, se va a purificar la sangre, a descongestionar las arterias y venas y en consecuencia el corazón va a trabajar mejor.
Al beber agua, se están introduciendo al organismo, dos de los elementos biogenésico (hidrógeno y oxígeno), por ello, se dice que, el agua es vida.
Así también, el agua actúa como catalizador de los componentes básicos del alimento (grasas, carbohidratos y proteínas), ya que participa en la hidrólisis de estos, por todo lo anterior, este vital líquido resulta ser un excelente complemento alimenticio.

EL HIGADO, LABORATORIO QUIMICO DEL ORGANISMO

Como ya se ha descrito previamente, el hígado, es considerado el laboratorio químico del organismo, debido a que es el órgano con mayor número de funciones (aproximadamente quinientas). Por lo que además de desarrollar un papel de primer orden, en los procesos metabólicos de los principales constituyentes orgánicos (proteínas, carbohidratos y grasas), el hígado desempeña o interviene directamente, en otras importantes funciones como, la secreción de la bilis, la protección del organismo contra la acción tóxica de diversas sustancias, la hemocateresis (destrucción de los glóbulos rojos envejecidos), la coagulación de la sangre, la regulación del volumen de sangre circulante y la termorregulación.


EL HIGADO, EN EL METABOLISMO DE LOS CARBOHIDRATOS

Los azúcares absorbidos durante la digestión (principalmente glucosa, galactosa y fructosa), tras llegar al hígado en forma de glucosa, son transformados por este en forma de glucógeno el cual es almacenado en el parénquima (tejido) hepático como polisacáridos de reserva (glucogenogénesis). Esta es vertida al torrente circulatorio y captada por los tejidos. El hígado es, además, capaz de sintetizar glucógeno a partir de sustancias distintas de los carbohidratos absorbidos por el tubo digestivo, como los aminoácidos y las grasas (gluconeogénesis). Mediante los procesos de glucogénesis y glucogenólisis el hígado, con la intervención de diversas hormonas participa en la regulación de la glucemia (insulina, adrenalina, hormonas hipofisarias y corticosuparrenales), y del sistema nervioso (glucoreguladores).


EL HIGADO, EN EL METABOLISMO DE LAS GRASAS

El hígado recibe un constante aporte de grasas a partir de la absorción intestinal y de las reservas del organismo (fundamentalmente del tejido adiposo). Parte de las grasas son desintegradas en este órgano mediante procesos oxidativos hasta agua y bióxido de carbono con formación de cerpos cetónicos, y parte son transformadas en fosfolipidos, y como tales distribuidas a través del torrente circulatorio a los diversos órganos y tejidos, el hígado posee además una importante función en el metabolismo del colesterol y en el de sus esteres.

EL HIGADO ENE EL METABOLISMO DE LAS PROTEINAS

Los aminoácidos que llegan al hígado procedente de la absorción intestinal o de la degradación de las proteínas titulares, pueden ser utilizados para la síntesis de nuevas proteínas (proteínas plasmáticas, como el fibrinógeno y la protrombina, importantes factores de la coagulación de la sangre), o bien sometidos a degradación tras la separación o transferencia del grupo amínico en virtud de los procesos de deaminación y transaminación (este último proceso interviene tanto en la degradación de aminoácidos como en la síntesis de nuevos). El amoniaco liberado en la deaminación es transformado por las células hepáticas en urea, la cual es eliminada por la orina. En el hígado se realiza también la formación de ácido úrico, procedente del metabolismo de las nucleoproteínas.


EL HIGADO, EN LA FUNCION ANTITOXICA Y PROTECTORA

Al hígado le corresponde probablemente la función desintoxicante más importante para el organismo. Desarrolla ésta acción protectora respecto a sustancias originadas en el intestino por los procesos de putrefacción bacteriana o de otra procedencia y también presentes en el organismo, mediante varios mecanismos:

a) Conjugación.- Consiste en la combinación de la sustancia nociva (o que hay que eliminar) con otra molécula o radical químico, formándose un compuesto menos activo o más fácilmente eliminable, que es alejado por la orina. Las sustancias más a menudo para realizar éstas síntesis protectoras son la glicocola, el ácido glucurónico, el ácido sulfúrico y el ácido acético.
b) Oxidación o reducción.
c) Excreción a través de la bilis.- El hígado produce una secreción que recibe el nombre de bilis (formada por sales inorgánicas entre las que predominan cloruros bicarbonatos de sodio, bilirrubina y colesterol), la cuál, se vierte al intestino interviniendo en los procesos de digestión y absorción, especialmente de las grasas la formación de la bilis por parte del parénquima hepático es continua; a medida que se forma, va siendo almacenada en la vesícula biliar, a partir de la cuál, se vierte intermitentemente a través del colédoco al duodeno, en relación con las fases digestivas.

OTRAS FUNCIONES DEL HIGADO

Actúa como órgano de depósito para algunas sustancias de gran importancia biológica, como el glucógeno, algunas vitaminas (A y B12), el hierro, el cobre, el factor antianémico (identificado por algunos como la propia vitamina B12); realiza la síntesis de la heparina; es un importante órgano de los glóbulos rojos envejecidos (función hemocaterética); es un importante órgano hemopoyético de la vida embrionaria; interviene en la regulación del volumen de sangre circulante, pudiendo almacenar en sus amplio capilares una gran cantidad de sangre que puede verter de nuevo a la circulación según las exigencias del organismo; tiene una importante participación en la termorregulación, ya que su actividad metabólica proporciona una cantidad de calor correspondiente al 25-30% del calor corporal total.

CAPITULO IV
DEFICIENCIAS METABOLICAS
(ENFERMEDADES)

El hígado es , sin lugar a duda, el órgano más incansable, silencioso y trabajador de nuestro cuerpo y, sin embargo, es también un órgano en el que se piensa poco, que se trata mal y al que, en consecuencia, se deben muchos de los padecimientos. Como ya se describió, este maravillosos órgano, puede compararse a un eficiente laboratorio, capaz de realizar un gran número de funciones distintas: selecciona, transforma, sintetiza, almacena y distribuye a los componentes del alimento que se ingieren, y al mismo tiempo, elimina todas aquellas sustancias tóxicas que podrían dañar al organismo, sea cual sea, la procedencia de las mismas, es decir, que el hígado es el gran director de la orquesta que es nuestro cuerpo.
Por todo ello, el hígado es considerado el guardián de la salud, pero para que pueda cumplir con tal tarea, es necesario que se le nutra adecuadamente, mediante el suministro equilibrado de los componentes ya descritos. Por otra parte, una alimentación deficiente va a ocasionar una afectación del hígado y consecuentemente una alteración en los sistemas: hormonal, nervioso, digestivo, circulatorio e inmunológico, produciendo una serie de secuelas traducidas en enfermedades. A continuación se describen algunas de ellas:

SISTEMA HORMONAL
DIABETES

Esta se produce de la siguiente manera: la glucosa que el hígado suministra a través del torrente sanguíneo, lleva por objeto penetrar a las células y combinarse con el oxígeno de los eritrocitos (glóbulos rojos), para llevar a cabo la reacción de combustión donde se desprende la energía que utiliza el organismo.
Sin embargo, para que la glucosa pueda penetrar a las células se requiere de la intervención de una hormona (insulina) y una enzima (glucoquinasa).
El páncreas, es una glándula de secreción interna (endocrina) y de secreción externa (exocrina); su principal actividad corresponde a esta segunda, ya que su función (aproximadamente el 95%) es producir jugos y enzimas digestivos; y solo el 5 % restante, se encarga de fabricar dos tipos de hormonas, por medio de una pequeñas islas (islotes de langerhans) contenidos en él los cuáles, están formados por tres tipos de células (alfa, beta y gamma).
Las células alfa, secretan una hormona llamada glucagón; y las células beta son las que producen la insulina; por lo que respecta a las células gamma, estás tienen una función aún en estudio.
El glucagón, es una hormona que estimula al hígado, para que éste, libere glucosa al torrente sanguíneo, mediante la actividad de una enzima (glucosa -6- fosfatasa), que se encarga de degradar al glucógeno almacenado en el hígado, a glucosa.
La insulina por su parte, facilita el paso de la glucosa desde la sangre a las células, por medio de la acción de una enzima que es la glucoquinasa, haciendo que la glucosa después de entrar a la célula, se convierta en un compuesto llamado glucosa -6- fosfato, el que después de varias reacciones, se convierte en bióxido de carbono y agua, obteniéndose energía química en el proceso (reacción de combustión), que representa al combustible requerido por el organismo.
La insulina, acelera la reacción de la glucoquinasa, o neutraliza el efecto de otra hormona que esté inhibiendo a la glucoquinasa.
La glucosa desaparece rápidamente hacia el interior de la célula, y es necesario que nuevas moléculas de glucosa difundan hacia la sangre a la misma velocidad.
Sin embargo, si hay escasez de insulina, la glucoquinasa trabaja mal y la glucosa -6- fosfato se forma despacio. Si la glucosa del interior de las células desaparece lentamente, la nueva glucosa que sigue entrando desde la sangre, lo hace igual de despacio. En consecuencia la glucosa se acumula en la sangre y aparecen todos los síntomas de la diabetes.
Por esta razón, las personas con diabetes presentan características de : sueño, desgano y falta de energía, debido a que no se está llevando a cabo la reacción de combustión, que es precisamente la productora de energía.

POLIURIA

Otra característica de la persona con diabetes, es que, tiene que estar orinando frecuentemente y esto, es debido también a la deficiencia de otra hormona producida por la hipófisis, que es una glándula que produce numerosas hormonas y que además, regula la actividad de otras glándulas endocrinas, y controla directamente actividades celulares y metabólicas.

ALBINISMO Y VITILIGO

Los melanocitos, son los productores de un pigmento que es la melanina la que a su vez, da la pigmentación de la piel, para proteger a ésta, de la acción de los rayos ultravioleta del sol. De hecho, el ser blanco o negro, va a depender de la cantidad de melanina que produzca la hipófisis, o sea que el color de la piel se debe a la actividad de ésta glándula.
Existen organismos que por alguna mutación (cambio) genética, su hipófisis no lleva la información para la producción de melanocitos, y en consecuencia, no se va a producir la pigmentación de la piel, originando el albinismo (anomalía congénita, que consiste en la ausencia total de la materia colorante de la piel, los ojos y el cabello).
En el caso del vitíligo (enfermedad cutánea caracterizada por manchas blancas, debida a una despigmentación de la piel), éste se origina a causa de un mal metabolismo de las proteínas por parte del hígado, ya que éste, al no estar fabricando correctamente a la proteína específica para estimular a la hipófisis media, ésta comienza a producir en forma deficiente a los melanocitos, motivando la despigmentación de la piel.

DESARREGLOS MENSTRUALES, QUISTES Y MIOMAS

Durante en ciclo menstrual, la hipófisis anterior, segrega tres hormonas que son: la luteinizante, la folículoestimulante y la luteotropa (prolactina); por otra parte, los ovarios (gónadas) producen dos hormonas que son: la progesterona y los estrógenos. En conjunto las hormonas señaladas, estimulan al folículo que hay en cada uno de los ovarios, con el objeto de que haya una adecuada maduración de los óvulos.
La deficiencia en la producción de las hormonas antes descritas (debido a que el hígado no está fabricando a las proteínas correspondientes, para estimular a las respectivas glándulas), va a ocasionar toda una serie de desarreglos durante la menstruación, tales como: cólicos, inflamaciones, retrasos y hemorragias escasas o abundantes; como el folículo no está siendo estimulado adecuadamente, entonces se empieza a atrofiar, originando los quistes en los ovarios, así como la malformación de células en la pared del útero, dando lugar a la formación de miomas.
Según se puede deducir de los ejemplos ilustrados, y en general en todos los casos de deficiencia hormonal, existe un denominador común, debido a que todas las hormonas son de naturaleza proteica, significa esto, que si el hígado no está metabolizando (fabricando) correctamente a las proteínas correspondientes, para estimular a cada una de las glándulas endocrinas (hipófisis, epífisis, tiroides, paratiroides, timo, suprarrenales, páncreas y gónadas), entonces, se tendrá toda una serie de desarreglos hormonales.
Cabe señalar que entre hormonas y neuronas (células nerviosas), existe una interrelación muy directa, de tal forma que, siempre que se produzca un desarreglo hormonal, como secuela de éste, se va a manifestar un desequilibrio en el sistema nervioso.

SISTEMA NERVIOSO

La función principal del sistema nervioso consiste en establecer la comunicación entre las diversas partes del cuerpo. Las informaciones que se transmiten a través de las líneas nerviosas no solo se dirigen hacia la periferia, sino que también van de los ojos a la piel u otros órganos sensoriales del cerebro. La transmisión de la información de una célula nerviosa (neurona) a otra, tiene lugar en una zona, que se establece entre las terminaciones del axón de una neurona y las arborizaciones dendríticas de otra, o bien entre las primeras y el cuerpo celular neuronal. A esto se le conoce como sinapsis.
Todo mensaje llega a la sinapsis en forma de estímulo nervioso, este es recogido por minúsculas moléculas, los neurotransmisores, y enviado a la célula nerviosa contigua; ésta se hace cargo de la orden de los neurotransmisores por medio de un receptor específico. A partir de ese instante la célula nerviosa, es decir la neurona, pondrá en marcha un complicado sistema de procedimientos bioquímicos en los que otras moléculas mensajeras diferentes a las anteriores intervienen y desempeñan un papel muy importante.
El principal acontecimiento ene el sistema nervioso, consiste en que las percepciones, pensamientos, sentimientos y actos son transportados por sustancias mensajeras llamadas drogas endógenas o neurotransmisores, siendo éstas las sustancias químicas que permiten el intercambio de información entre las miles y millones de células, las cuales, se mantienen en un contiguo diálogo entre ellas.
De no existir los neurotransmisores o drogas endógenas, no sería posible que se produjera la sinapsis, ni el pensamiento, ni la conciencia, ni la psique, ni la mente.
Afortunadamente el ser humano produce sus propias drogas, las drogas endógenas o del cerebro. La gama de estos productos químicos creados por la corteza cerebral y otras áreas del cerebro, abarca desde los estimulantes antidepresivos, analgésicos, tranquilizantes y ansiolíticos, hasta los afrodisíacos y los somníferos. Los descubrimientos en Inglaterra a partir de la biorretroalimentación sobre la estimulación voluntaria consciente de las drogas endógenas, tales como adrenalina, endorfinas, endovalium, insulina, cortisona, seretonina, estrógeno, dopamina, oxitocina, fenilalanina, crean un nuevo campo en el estudio de la medicina.
Según la formula química de cada sinapsis hay un efecto en la psique, en la mente y en nuestra autoconciencia. Hay, por lo tanto, determinadas sustancias químicas, drogas endógenas o neurotransmisores responsables de cada tipo de emoción y de cada tipo de razonamiento, así como de cada tipo de aprendizaje. En la memoria intervendrá, específicamente, la acetilcolina; en la euforia las endorfinas; en el amor, la ternura y los pensamientos amorosos, la oxitocina; en el entusiasmo sexual, la dopamina unida a la oxitocina.
Dicho de otro modo, nuestro estado de ánimo, emociones, pensamientos, habilidades, aprendizajes, actos de memoria, capacidad de lectura y de comunicación se deben a procesos electroquímicos y al impacto de estas sustancias químicas. Cuando una persona no tiene suficiente acetilcolina para “aceitar” sus sinapsis de memoria, no tendrá una buena memoria; la regulación y la cantidad específica de éstas sustancias determinan el tipo y la cantidad de los pensamientos y actos de conciencia. O sea que, cuando se forman los neuroconductores de la tristeza en la corteza cerebral nos ponemos tristes, cuando se forman los neuroconductores de la alegría nos ponemos alegres.
Las drogas endógenas (las producidas por el organismo) o neurotransmisores están constituidos por proteínas, aminoácidos y hormonas; esto significa que, si no existe una adecuada alimentación se afectara al metabolismo de las proteínas, aminoácidos y hormonas por parte del hígado, con el consecuente desequilibrio neuronal.
Administrar éstas sustancias a partir de síntesis química (drogas exógenas), puede estimular efectos parecidos, pero no iguales; tampoco es recomendable este tipo de aplicación, ya que produce adicción y efectos secundarios de contraindicación clínica muy inadecuada para la salud.
Cuando una droga artificial (droga exógena) actúa con total eficacia, es que acopla a determinadas zonas de alcance con áreas endógena, y por lo tanto, altera la química cerebral.

SISTEMA DIGESTIVO

Una de las múltiples funciones del hígado, es la de producir jugo biliar, mismo que vierte a la vesícula, la que a su vez tiene la capacidad de almacenar entre cincuenta y sesenta mililitros de éste, para posteriormente expulsarlo a través del colédoco hacia el duodeno (intestino delgado, en su primera parte), que es donde se lleva a cabo el proceso de digestión del alimento.
A pesar de no contener ningún fermento digestivo, el jugo biliar desempeña un papel muy importante en la digestión, colaborando activamente con el jugo pancreático y emulsionando las grasas para que puedan ser absorbidas.
Efectivamente, si no existiera el jugo biliar las grasas que son insolubles e impermeables, se eliminarían sin apenas aprovecharse. Es gracias a la acción del jugo biliar, que las convierte en una finísima emulsión, además de que las grasas también son atacadas por la lipasa del páncreas, para ser absorbidas a través de las paredes intestinales.
El jugo biliar por su naturaleza química alcalina, además de su intervención en el metabolismo de las grasas, neutraliza la acidez de la masa digestiva y contribuye así a controlar la acidez de la masa digestiva y contribuye así a controlar la acidez gástrica, evitando la formación de úlceras gástricas y duodenales.
Al jugo biliar también se le atribuye una acción antiséptica sobre la flora microbiana intestinal y contribuye a dar el color marrón a las heces fecales, debido a que se oxida y oscurece a su paso por el intestino grueso. Sin embargo, si el hígado no está trabajando correctamente y no produce adecuadamente el jugo biliar, o bien, si existe una litiasis (cálculos en la vesícula) al no llegar al intestino, se va a provocar un estado de acidez permanente, ocasionando problemas digestivos, tales como: agruras, gastritis, úlceras, estreñimiento, hemorroides y colitis (inflamación del intestino).


SISTEMA CIRCULATORIO

El organismo se sirve de los componentes básicos (grasas, carbohidratos y proteínas), y lo que ya no utiliza lo desecha, en forma de ácido úrico, colesterol y urea.



GRASAS

ORGANISMO
COLESTEROL
CARBOHIDRATOS
ACIDO URICO
PROTEINAS
AREA



O sea, que el ácido úrico, el colesterol y la urea, son los desechos, producto del metabolismo de las grasas, carbohidratos y proteínas. De suyo el metabolismo, es el conjunto de transformaciones materiales que se efectúan constantemente en las células del organismo y que se manifiesta en dos fases diferentes: una de carácter constructor o anabólico, y otra de carácter destructor o catabólico (desechos).
Por ello, el organismo siempre va a producir desechos debido a su acción catabólica, pero dentro de un rango, vertiéndolos a la sangre; y ésta a su vez tiene que pasar a través de los riñones.
La función de los riñones es la de separar impurezas de la sangre y eliminarlas a través de la orina.
La sangre entra por las arterias renales a los riñones y continúa por una red de vasos capilares sanguíneos a los nefrones, que son los responsables del proceso de diálisis (filtración), y que están constituidos por el glomérulo de Malpighi y el tubo urinífero (cápsula de Bowman, asa de Hele, etc.); en cada riñón, existen aproximadamente un millón doscientos mil nefrones, donde se purifica toda la sangre, mientras que con los residuos se forma la orina, separando de la sangre el exceso de agua, minerales, urea, ácido úrico, colesterol y otras sustancias de desecho.
Sin embargo, cuando el hígado está metabolizando mal a las grasas, carbohidratos y proteínas, va a producir tales desechos, pero en forma excesiva, que al verterlos a la sangre, va a producir una sobrecarga a los nefrones formándose en ellos una especie de sarro provocando con esto las infecciones en los riñones y vías urinarias, así como la litiasis (formación de cálculos) y las neuropatías.
Como la sangre ya no está siendo purificada adecuadamente, entonces, se va sucia a toda la tubería que es el sistema circulatorio.
Si se hace conducir agua sucia en una tubería, con el tiempo, se va formar sarro en ésta, pues algo análogo sucede en las arterias, ya que al ir sucia la sangre las va a congestionar, formando inicialmente una capa de grasa en las mismas, dando lugar a la ateroesclerosis (acumulación de grasa en las arterias); y posteriormente a la arteriosclerosis (endurecimiento de las arterias), lo que también se va a manifestar en las coronarias (arterias de corazón), produciendo: sofocación, angustia, dolor de cerebelo, taquicardias y hasta la propia angina de pecho.
Así mismo, el ácido úrico y el colesterol en exceso se van a empezar a acumular en las articulaciones, cristalizándose y formando un medio ácido, que va a empezar a degradar al cartílago, causando la deformación de las articulaciones, originando así de ésta manera la artritis.

Estos mismos cristales de ácido úrico y colesterol, van a aprisionar a los tendones, provocando: reumas, calambres, adormecimiento de brazos y piernas; la misma retención de ácido úrico y colesterol va a producir ardor en la planta de los pies, inflamación de extremidades inferiores y la gota.
Las arterias al congestionarse por tantos desechos sufren una estenósis (disminución de su diámetro interno), provocando una hipotensión (presión arterial baja) o una hipertensión (presión arterial alta), además del riesgo de sufrir trombosis. Lo mismo que sucede en las arterias (que llevan la sangre oxigenada de los pulmones a los tejidos), va a ocurrir en las venas (que transportan la sangre de retorno), por lo que éstas últimas, también se congestionan sufriendo una flebitis, apareciendo las várices.
Como el ácido úrico y el colesterol son más densos (más pesados) que la sangre, tienden a depositarse por acción de la gravedad en las extremidades inferiores, dando lugar a la edematización (inflamación) de las piernas y al haber rompimiento de vasos de la circulación periférica, se produce la isquemia (amoratamiento) de las extremidades inferiores.
En un punto dado de la vena, pueden confluir las impurezas, ocluir a la vena y romperla, produciendo las úlceras varicosas.
Todo lo antes señalado, tiene su origen en el mal trabajo del hígado, por tal razón, hay personas a las que les operan de las varices y posteriormente vuelven a aparecer, hay a quienes les abren la rodilla, para extraerles cristales de ácido úrico y de colesterol y se les vuelven a formar; hay a quienes les operan de hemorroides o de cálculos en los riñones y también vuelven a surgir. ¿Por qué?.
Pues, porque lo que sigue trabajando mal es el hígado, es decir se ataca al efecto pero no a la causa del problema; o sea que, mientras no se llegue a la raíz del malestar, únicamente se están dando paliativos.








SISTEMA INMUNOLOGICO

El organismo, puede ser agredido por un microorganismo, mismo que podría presentarse de las formas siguientes:





BACTERIAS

POTOZOOS
MICROORGANISMOS
(microbios)


ALGAS

HONGOS



Los microorganismos pueden entrar en el cuerpo a través de diferentes vías.

Estas son: digestivas, respiratoria, por inoculación o por contacto.
Cuando un germen patógeno, como por ejemplo, una bacteria infecciosa intenta penetrar en el organismo, no lo consigue sin antes superar una serie de impedimentos que le tienden las defensas naturales, debe franquear en primer lugar, las barreras que separan el medio interno, del medio externo. Como a continuación se describe:

PRIMERA BARRERA: La piel y las mucosas.

La epidermis formada por células superpuestas y apretadas unas contra otras constituye una barrera infranqueable para la mayoría de los microbios. Las secreciones sebáceas y el sudor generan un pH ligeramente ácido muy eficaz contra los hongos.
Los orificios naturales de los animales (ocular, nasal, bucal, bronquial, rectal y genitourinario), están recubiertos por un epitelio delgado y muy húmedo (la mucosa), que posee una serie de mecanismos químicos de defensa propios, como las lágrimas de los ojos, las secreciones gástricas del estómago o la saliva de la boca. En el caso de la mucosa bronquial, además de secretar el mucus, hay en ella un epitelio con cilio, cuyo movimiento continuo elimina el mucus juntamente con las partículas del polvo y gérmenes atrapados, que se expulsan por expectoración. En el estómago, la acidez del jugo gástrico segregado por la mucosa estomacal, así como las enzimas, destruyen muchos microorganismos.
Los microbios patógenos atacan a las células directamente destruyéndolas o envenenándolas con sus toxinas. Así, la virulencia de un organismo infeccioso está determinada por dos factores:
El poder invasor, es decir, la capacidad que tiene el agente invasor para proliferar en el organismo atacando, lo cuál depende tanto de la propia naturaleza del germen, como de la capacidad de defensa del organismo infectado, lo que en términos generales, se puede llamar el estado de salud.
La producción de toxinas que dañan el organismo. Las toxinas, son sustancias nocivas liberadas por el microbio, que se distribuyen por las vías circulatorias y provocan los síntomas de la enfermedad, inclusive, en lugares muy alejados de donde se liberaron.

SEGUNA BARRERA

Cuando los microorganismos patógenos consiguen atravesar todas las barreras externas, penetran directamente en los tejidos, desencadenando una serie de respuestas encaminadas a impedir la acción del agresor, se trata de un verdadero despliegue de fuerzas de defensa.
Los microbios son atacados por las células (leucocitos) encargadas de la defensa del organismo. Existen varios tipos de fagotitos, siendo los polinucleares los primeros en atacar; atraídos por las toxinas de los microbios, atraviesan la pared de los capilares y se “comen” (fagocitan) a los intrusos, aunque posiblemente, no puedan con todos. Los supervivientes pasarán a la linfa que baña los tejidos, donde se encontrarán con unas grandes células móviles de defensa, llamadas macrófagos, que son también capaces de fagotizar gérmenes patógenos. En especial, los llamados polinucleares, pueden gracias a su gran tamaño (su nombre así lo indica), comerse las células que los microbios hayan destruido, esas grandes células solo se mueven en los tejidos durante las infecciones, cuando no hay infecciones permanecen en reposo.
Estas células (que se encuentran fijas en el tejido conjuntivo, el hígado, el bazo, los ganglios y vasos linfáticos), en cuanto al resultado de ésta lucha sin cuartel, presentan dos posibilidades:
La primera, es que la fagocitosis sea activa que la proliferación de los microbios, en cuyo caso, serán totalmente destruidos.
La segunda, es que la fagocitosis haya sido insuficiente, y el número de microbios patógenos aumente, entonces, los leucocitos mueren envenenados por las toxinas.

Si los microbios vencen ésta barrera defensiva, la infección se propagará siguiendo las venas y vasos linfáticos, provocando la inflamación de los ganglios.
Los ganglios linfáticos son un centro donde se produce diversos tipos de linfocitos, el choque entre los microbios y los linfocitos es la causa de la inflamación de los ganglios, que se hacen dolorosos. Y si los microbios son especialmente activos. O cuando el individuo está débil, los ganglios se llenan de pus, o sea, de linfocitos muertos flotando en la linfa, formándose nuevos abscesos, en casos extremos, cuando la infección consiga franquear la barrera defensiva que encuentra en los ganglios, se propagarán por venas y vasos linfáticos, produciendo una infección generalizada, lo cual, se conoce con el nombre de septicemia.



Tercera barrera: Las células inmunitarias

Cuando se produce la septicemia las defensas locales no bastan, en este caso, el organismo dispone de una tercera barrera defensiva formada por las células inmunitarias. Se trata de los linfocitos B y T , capaces de reconocer a los agresores y de fabricar un material defensivo específico para oponerse al microbio invasor o antígeno.
Se llama antígeno a cualquier sustancia extraña que introducida en el interior del organismo, provoca una respuesta inmunitaria consistente en la producción de anticuerpos, una especialidad realmente extraordinaria de los leucocitos macrófagos y de los linfocitos.
Cada anticuerpo reconoce un antígeno determinado, siendo capaz de reaccionar con el para neutralizarlo. La unión antígeno anticuerpo es específica: cada tipo de anticuerpos se una solamente a un tipo de antígeno.
Todas las células que forman el ejército defensivo del organismo, tiene una particularidad, que son, de origen proteico, esto significa que si el hígado está metabolizando adecuadamente a las proteínas de nuestro sistema inmunológico estará trabajando correctamente; por el contrario, si el hígado está metabolizando mal las proteínas, como consecuencia de esto, nuestro sistema inmunológico será fácilmente agredido, ocasionando toda clase de enfermedades infecciosas, (bronquitis, asma, gripe, salmonelosis, cólera, tuberculosis, etc.) .


CAPITULO V SOLUCION

AUTORRECUPERACION BIOQUIMICA

El organismo de los seres vivos, mantiene su actividad, gracias a los procesos bioquímicos (reacciones químicas), que se desarrollan en su interior. En el ser humano, tales procesos se logran gracias a la ingestión de productos vegetales, animales y minerales, de los cuáles, el hígado (considerado el laboratorio) absorbe, metaboliza, sintetiza y distribuye hacia todo el organismo.
De lo anterior se deduce la importancia de mantener en buen estado nuestro hígado, lo cuál, se logra a través de una alimentación balanceada, a base de grasas, carbohidratos, proteínas, minerales, vitaminas y agua.
Traduciéndose esto en una salud optima tanto física como mental.

(Alimento vigorizante), elaborado a base de los siguientes ingredientes;

Proteína aislada de la soya
Amaranto
Grasa vegetal de soya
Fécula de maíz (maltodextrina)
Lecitina de soya
Minerales
Vainilla, Cacao y Fresa
“Bioaliv”, es una excelente fuente nutricional que actúa como energetizante, reconstructor de tejidos y regulador de los procesos metabólicos, con todos los nutrientes requeridos por el organismo.

“Bioaliv”, por su alto contenido nutricional, es recomendable para toda la familia, desde el bebé hasta la mujer embarazada, madres en periodo de lactancia, deportistas y organismos con problemas digestivos y desnutrición.

Después de diversas pruebas en organismos con carencias nutricionales, “Alivimex” logró obtener la formulación apta para las diversas necesidades, con el siguiente contenido nutrimental:

CONTENIDO NUTRIMENTAL DE “Bioaliv”

Contenido por cada 100 gramos
Valor energético 420 Kilocalorías

Proteínas 35.00%
Grasas 10.00%
Carbohidratos 45.00%
Fibra 5.00%
Calcio 0.19%
Fósforo 0.50%
Hierro 0.64%
Zinc 0.34%


FUNCION DE SUS INGREDIENTES EN EL ORGANISMO
RECONSTRUCCION DE TEJIDOS
PROTEINAS


“Bioaliv”, Es un alimento en polvo que contiene proteínas de soya y amaranto, que proveen de los aminoácidos esenciales (aquellos que pueden ser sintetizados por el hígado) y que son indispensables en la dieta, para regular los procesos metabólicos.
Es importante mencionar que “Bioaliv”, está elaborado con proteína libre de lipoxidasa, que es una enzima que produce el sabor amargo y desagradable característico en los alimentos elaborados con soya, haciendo por ello, un producto natural y de grato sabor.







UN CORAZÓN MÁS SANO

GRASAS

“Bioaliv” incluye grasas vegetales, que a diferencia de las grasas animales, limpian el sistema circulatorio y ayudan a disminuir los niveles de colesterol malo (LDL o grasas de baja densidad).

Una dieta con grasas vegetales, nos ayuda a disminuir los riesgos de padecer problemas como: embolias, infartos y enfermedades del corazón en general.

ENERGIA

HIDRATOS DE CARBONO

En la elaboración de “Bioaliv” se utiliza fécula de maíz (maltodextrina) un azúcar de origen natural que le brinda un sabor agradable y consistencia, proporciona energía y es de fácil digestión.

Se han eliminado de “Bioaliv” dos carbohidratos (rafinosa y estaquinosa) ya que estos son fácilmente fermentables en el intestino produciendo (gases).

EL PESO IDEAL

LECITINA DE SOYA

La lecitina de soya, es un ingrediente de “Bioaliv” que ayuda a metabolizar y aprovechar mejor las grasas de nuestro cuerpo, ayudando así al mantenimiento del sistema circulatorio y conservar el peso ideal.

UNA BUENA DIGESTION

FIBRA DIETETICA

La fibra juega un papel muy importante para la buena digestión, ya que estimula el movimiento natural (peristáltico) del tubo digestivo, facilitando la absorción de los alimentos, y al mismo tiempo, ayuda a regularizar las evacuaciones disminuyendo los problemas de estreñimiento y colitis.

HUESOS SANOS

MINERALES

Los minerales contenidos en “Bioaliv”, son un complemento alimenticio, que actúan como catalizadores (activadores) de todas las reacciones químicas que intervienen en el organismo y regulan el intercambio iónico en el sistema nervioso, además son indispensables en la constitución de dientes y huesos.

MODO DE PREPARAR

Mezclar tres cucharadas soperas de “Bioaliv”, en un vaso 250 ml. (o biberón de ocho onzas)
Con agua, agregar fruta (vitaminas) al gusto y licuar, obteniendo con esto un alimento completo (con sus seis componentes).


RECOMENDACIÓN ADMINISTRACION DIARIA

MAÑANA TARDE NOCHE

Lactantes (0-1 año) 1 biberón 1 biberón 1 biberón

Niños 1 vaso 1 vaso

Adolescentes 1 vaso 1 vaso

Adultos 1 vaso 1 vaso

Mujeres embarazadas 1 vaso 1 vaso 1 vaso

Madres lactantes 1 vaso 1 vaso 1 vaso

Deportistas 1 vaso 1 vaso 1 vaso

Problemas de desnutrición 1 vaso 1 vaso 1 vaso

Problemas de anorexia
(Inapetencia) 1 vaso 1 vaso 1 vaso


SEGUNDA FASE:

La mayoría de los procesos nutricionales, se enfocan sobre todo en el abastecimiento de grasas, carbohidratos, proteínas y vitaminas, pasando por alto frecuentemente la actividad de los minerales y el agua, pero el organismo no puede prescindir de ellos, puesto que desempeña un papel muy importante en el proceso metabólico.
Actualmente, el estilo de vida, las condiciones laborales así como el estrés, dan lugar a enfermedades que antes no se conocían. No solo en las personas de avanzada edad, sino también en niños y lactantes se han observado indicios de que una de las causas de estos cuadros de enfermedad se encuentra, en determinadas circunstancias, en trastornos del metabolismo de los minerales y los oligoelementos. Dado que nuestro organismo no puede sintetizarlos por el mismo resulta necesario incluirlos en la alimentación durante toda la vida.

Por lo anterior, ésta fase, consiste en la ingestión de complementos alimenticios: “Olicact”, formulación desarrollada también por “Alivimex”, con el cual, se hace el suministro de minerales como parte del alimento.

CARACTERISTICAS DE “Olicact”


“Olicact”, es un compuesto elaborado a base de minerales y oligoelementos extraídos de la arcilla y disueltos en extracto de cactus, nopal y sábila, que cumplen con las funciones de catalizador (activador), regulando los procesos metabólicos, y por tal razón efectúa una actividad descongestionante dando como resultado la autorrecuperación del propio organismo.

“Olicact” ¡NO ES UN MEDICAMENTO! Sino un complemento alimenticio que ayudará a cubrir las deficiencias provocadas por el hábito nocivo en el comer, a causa del ritmo de vida actual, de tal manera que al ingerirlo se observan resultados sorprendentes.

¿Cómo funciona “Olicact”?

“Olicact”, es un compuesto elaborado con productos naturales de fácil manejo, no toxico y que por las características de sus componentes, realiza la función de catalizador (activa o inhibe) de los procesos metabólicos del organismo y muy en especial del hígado, de tal forma que al lograr el descongestionamiento de este órgano, se obtiene la capacidad de autorrecuperación del organismo y en consecuencia se autorregulan los diversos sistemas (nervioso, hormonal, digestivo, circulatorio, inmunológico, etc.)

¿Cómo reacciona el organismo con “Olicact”?

Cuando el hígado se encuentra congestionado, se producen reacciones bioquímicas en desorden, transformando el beneficio de dichas reacciones en sustancias tóxicas y nocivas.
Al iniciarse el tratamiento con “Olicact”, dado que este remueve impurezas dichas toxinas son eliminadas por los mecanismos naturales de expulsión del organismo. Sin embargo, ciertos organismos al estar excesivamente intoxicados (por fármacos o alcohol), presentan cuadros de descongestión y remoción de toxinas en forma drástica; estas sensaciones extrañas, son el síntoma más indicativo de que el organismo reacciona y se libera de tantos huéspedes nocivos e innecesarios.


Las reacciones que se pueden presentar son: mareo, náuseas, vómito, fiebre, diarrea, dolor de articulaciones o erupciones cutáneas (prurito), debido a que se expulsan al exterior las toxinas. Ante estas situaciones se recomiendan tres opciones:

Primera.- Continuar el tratamiento y soportar el malestar durante tres o cuatro días (periodo que dura la expulsión de toxinas) y tomar líquidos en abundancia.

Segunda.- Disminuir la dosis hasta cinco gotas tres veces al día durante una semana y una vez transcurrida esta, reiniciar el incremento diario hasta llegar a la dosis indicada.

Tercera.- Cuando un organismo ha consumido tranquilizantes, corticoides o antibióticos en forma excesiva y por tiempo prolongado, está muy congestionado, y en este caso se recomienda ir aumentando una gota por semana en cada toma.

MODO DE EMPLEO

VIA ORAL

“Olicact”, se toma en gotas disueltas en agua (por la característica de sus componentes, resulta de un sabor desagradable, y para enmascarar este, se recomienda disolverlo en jugo de naranja, agua mineral, agua de limón, yogurt o en “Bioaliv”.

La ingestión de “Olicact”, independientemente del padecimiento, se inicia siempre, disolviendo una gota en un cuarto de vaso con agua o cualquiera de los líquidos antes mencionados, tomando ésta dosis dos veces al día, durante cuatro días, generalmente antes de los alimentos. A partir del quinto día aumentar una gota diariamente en cada toma, hasta llegar a la dosis marcada, deacuerdo al tipo de padecimiento (ver tabla de padecimientos y dosificaciones).

“Olicact”, tiene diversas aplicaciones, para lo cuál, es necesario preparar las siguientes soluciones:

VIA CUTANEA (SOLUCION1)

Esta solución se prepara para tratar afecciones de la piel, dolores musculares, inflamaciones, micosis, ulceraciones y hernias.

Disolver trescientas gotas (tres cucharadas cafeteras) de “Olicact”, en medio litro de agua hirviendo, empapar un lienzo de ésta solución para aplicar como fomento o compresa en zona afectada, una o dos veces al día. La solución sobrante se guarda en un frasco cerrado para usar previo calentamiento en aplicaciones posteriores.
VIA OFTALMICA: (SOLUCION 2)

Esta solución se prepara para utilizar en problemas de carnosidad, cataratas, conjuntivitis e infecciones de los ojos.

Disolver diez gotas de “Olicact”, en un cuarto de vaso de agua y de ésta mezcla aplicar tres gotas en cada ojo con lava ojos dos veces al día.

VIA NASAL Y OTAL: (SOLUCION 3)

Esta solución se prepara para ser utilizada en infecciones de la nariz y oídos.

Disolver veinte gotas de “Olicact”, en un cuarto de vaso con agua y de ésta mezcla aplicar cinco gotas en cada oído o en cada fosa nasal, dos veces al día.

VIA GARGARISMO: (SOLUCION 4)

Esta solución se prepara para utilizar en problemas bronquiales y asmáticos.

Disolver cuarenta gotas de “Olicact”, en medio vaso con agua tibia, al que previamente se le exprime el jugo de un limón, mezclar y hacer gárgaras sin pasarse la solución, solamente el último trago. Hacer esto por las mañanas.

VIA INTRAUTERINA: (SOLUCION 5)

Esta solución se prepara para aplicarse en infecciones vaginales y tumores intrauterinos (quistes, miomas y carcinomas).
Disolver trescientas gotas (tres cucharadas cafeteras) de “Olicact”, en un litro de agua tibia, con ésta mezcla efectuar la ducha vaginal tres veces por semana, hasta la desaparición del padecimiento.


A continuación se describe una tabla de padecimientos y su dosificación, haciendo hincapié en que todas las dosis deberán tomarse tres veces al día antes de los alimentos. A excepción de las que se indican cuatro veces al día, en tales casos deberán tomarse cada cuatro horas.










TABLA DE PADECIMIENTOS Y DOSIFICACION


PADECIMIENTO DOSIFICACION DE “Olicact”,

Ácido úrico 30 gotas y solución 1
Amigdalitis 30 gotas y soluciones 1 y 4
Angina de pecho 15 gotas y soluciones 1
Arteriosclerosis 25 gotas
Artritis 40 gotas y solución 1
Asma 30 gotas y soluciones 1 y 4
Bronquitis 30 gotas y soluciones 1 y 4
Cálculos biliares y renales 50 gotas y solución 1
Cáncer (cuatro veces) 50 gotas y solución 1
Carcinomas intrauterinos (cuatro veces) 30 gotas y solución 5
Carnosidad en ojos 30 gotas y solución 2
Cataratas en ojos 30 gotas y solución 2
Colesterol 50 gotas
Colitis 40 gotas y solución 1
Diabetes 40 gotas
Disentería 40 gotas
Enfermedades del corazón 15 gotas
Epilepsia 30 gotas
Estreñimiento 30 gotas
Gangrena (cuatro veces) 30 gotas y solución 1
Gastritis 25 gotas
Gota 40 gotas y solución 1
Gripe (cuatro veces) 40 gotas y solución 3
Hemiplejia 40 gotas y solución 1
Hemorroides 30 gotas y solución 1
Hepatitis 30 gotas y solución 1
Hipertensión 30 gotas
Infección cutánea 40 gotas y solución 1
Infección de oídos 30 gotas y solución 3
Infección de ojos 30 gotas y solución 2
Infección renal 40 gotas y solución 1
Infección vaginal 30 gotas y solución 5
Inflamaciones 30 gotas y solución 1
Laringitis 30 gotas y solución 4
Leucemia (cuatro veces) 30 gotas
Lupus 30 gotas y solución 1
Micosis 30 gotas y solución 1
Migraña 30 gotas
Miomas 30 gotas y solución 5
Neuralgia 30 gotas
Neurosis 30 gotas
Parasitosis 30 gotas
Parkinson 30 gotas
Próstata 40 gotas y solución 1
Psoriasis 40 gotas y solución 1
Pulmonía (cuatro veces) 25 gotas y solución 1
Reumatismo 40 gotas y solución 1
Rinitis 30 gotas y solución 3
Sinusitis 30 gotas y solución 3
Tos (cuatro veces) 30 gotas y solución 1 y 4
Ulceras estomacales 25 gotas y solución 1
Ulceras varicosas 30 gotas y solución 1
Vitiligo 10 gotas y solución 1


“Olicact”, puede ser ingerido desde recién nacidos hasta más de cien años. Incluyendo a mujeres embarazadas.


DOSIFICACION INFANTIL

EDAD DOSIFICACION DE “Olicact”,

De recién nacidos a un año Hasta 5 gotas tres veces al día
De uno a tres años Hasta 10 gotas tres veces al día
De tres a cinco años Hasta 15 gotas tres veces al día
De seis a diez años Hasta 20 gotas tres veces al día
De once en adelante La dosis de un adulto


OTRAS APLICACIONES

Heridas.- Aplicar “Olicact”, de inmediato y directo, detiene la hemorragia, cauteriza y evita la infección.

Quemaduras.- Aplicar “Olicact”, de inmediato y directo, evita que se ampule y calma el dolor.

Aplicaciones de la piel.- Para manchas estrías y rozaduras, aplicar 20 gotas de “Olicact”, en medio vaso de agua, y con esta solución, limpiar la zona afectada, posteriormente aplicar dos o tres veces al día.

Golpes o dolores internos.- Disolver tres cucharadas cafeteras de “Olicact”, en agua hirviendo y aplicar con compresas en la zona afectada (solución 1).

Dolor de muelas o extracciones.- Aplicar dos o tres gotas de “Olicact”, en forma directa, quita el dolor y/o detiene la hemorragia.

Hongos en las uñas.- Aplicar en las uñas afectadas y en forma directa tres o cuatro gotas de “Olicact”, diariamente.

Caspa o caída del pelo.- Mezclar en el shampoo que se va a utilizar en el momento (no en la botella), veinte gotas de “Olicact”, una vez al día

Para personas en estado de ebriedad.- Mezclar en su bebida treinta gotas de “Olicact”, y dárselo a tomar. Si la persona ya no sigue tomando elimina el estado de embriaguez y si sigue tomando se quedara dormido.

Como bactericida en los alimentos.- Mezclar cincuenta gotas de “Olicact”, en medio vaso con agua, verterlo al alimento y volver a hervir a este.

Para desinfectar verduras.- mezclar veinticinco gotas de “Olicact”, en un litro de agua,
Introducir las verduras y dejar reposar durante diez minutos.

RECOMENDACIÓN
Durante el proceso de autorrecuperación, fortalecimiento limpieza, es conveniente evitar los irritantes en la alimentación diaria, por lo que se recomienda no comer carne de cerdo, poco picante y solo consumir grasas vegetales. No tomar café, alcohol ni refrescos.



TERCERA FASE

SUMINISTRO DE AGUA

El agua es uno de los componentes del alimento, del que menos uso hacemos, la eliminación de toxinas por parte del organismo se lleva a cabo, de las tres maneras siguientes: por el sudor, la orina y el excremento. Si se toma agua se van a activar las glándulas sudoríparas y a través del sudor se van a eliminar toxinas, se van a limpiar los riñones, las arterias y el corazón va a trabajar mejor. Por lo mismo es importante ingerir diariamente y como mínimo tres litro de agua (agua simple o de frutas naturales, té o jugos naturales), para ésta manera hacer una adecuada limpieza del organismo.

Si se ingiere el volumen de agua mencionada, las molestias ocasionadas por la remoción de toxina por parte de “Olicact”, va a ser mínimas; pero si no se toma la suficiente cantidad de agua, se van a manifestar todas las molestias propias de la remoción antes citada.